Balbino Dávalos

Primera emoción

Los núbiles capullos de las flores amanecieron a la luz abiertos; con más melancolía canta el ave, con más fulgores resplandece el cielo.

Algo, también, como una luz muy viva, comienza a difundirse por mi pecho… Se me alboroza el alma, y se me inunda de singular y misterioso ensueño.

Súbito el aire aquiétase; reprime su canto el ave; se detiene el tiempo; sobre sus ejes se estremece el mundo, tiembla mi corazón… Amor, ¡te siento!

-Balbino Dávalos

Texto extraído del libro Nieblas londinenses y otros poemas, ed. Carlos Ramírez Vuelvas (2007), del autor Balbino Dávalos.

Dávalos, B. (2007). Nieblas londinenses y otros poemas, ed. Carlos Ramírez Vuelvas. México: Universidad Nacional Autónoma de México (Ida y regreso al siglo XIX) .

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